¿Sabes que debe contener la mochila de emergencia? Principalmente, todo aquello que te ayude a sobrevivir durante las 72 horas después de un sismo o cualquier otro desastre.
La alerta sísmica se activa 50 segundos antes de que sientas el movimiento sísmico, pero algunos sismos inician a la par de la alerta y, entonces, es vital aprovechar cada segundo. ¡La mochila de emergencia entra al rescate!
Es ideal que cada miembro tenga su propia mochila y se adapte a las necesidades específicas de cada familia. Si aún no la tienes, compra una que sea impermeable, con costuras reforzadas y grande pero que te permita mover libremente los brazos.
Hay muchas sugerencias acerca de lo que debes cargar en tu mochila de emergencia, pero aquí te decimos lo esencial:
¿Qué debe llevar la mochila de emergencia?
- Botiquín de primeros auxilios: alcohol, tintura de yodo, algodón, vendas, tela adhesiva, paracetamol, cubrebocas y guantes de latex. Si alguien de tu familia padece alguna enfermedad crónica incluye su medicamento
- Documentos importantes, como acta de nacimiento, comprobante de domicilio, copia de una identificación oficial, CURP, pasaporte, certificados de estudios, facturas de tus bienes (casa, automóvil, etc), cartilla de vacunación. Guarda todo en una bolsa impermeable y, si es posible, haz un respaldo electrónico en una usb.
- Alimentos como barras de chocolate, galletas, frutos secos, sobres de atún, papillas de bebé, leche en polvo o cualquier otro alimento fácil de abrir y que aporte energía.
- Botellas con agua (3 lts)
- Una hojita con teléfonos de emergencia y de contacto de familiar en caso de emergencia
- Una radio con baterías
- Lámpara de mano con batería
- Una manta y una chamarra
- Artículos de higiene: Papel, toallas húmedas, gel antibacterial y, en su caso, toallas sanitarias y pañales
- Silbato
- Encendedor
- Dinero
- Duplicado de las llaves de tu casa y automóvil
- Navaja multiusos
Y si tienes mascotas
- Porciones de alimento, agua, su carnet de vacunación y un plato colapsable
Te sugerimos hacer un checklist cada mes, por si te falta algo o hay que reemplazar algún medicamento o alimento caducado.
De preferencia revisa las botellas de agua, el líquido en sí no caduca pero el plástico se va degradando y permite el paso de microorganismos que contaminan el agua.
Verifica que tu mochila no pese más de 8 kilos o, por lo menos, que no rebase los 12 kilos para que no sea difícil cargarla. Además, déjala accesible asignándole un lugar en la ruta de evacuación y nunca la cambies.
Una familia preparada tiene grandes posibilidades de supervivencia.
